
Constituye uno de los momentos
fundamentales de la historia universal y
representa el encuentro de dos mundos que habían evolucionado
independientemente desde el origen de la humanidad, lo cual cambió el rumbo de la historia.
En los siglos posteriores España, Portugal y en
menor medida Inglaterra, Francia y otras potencias europeas compitieron por la exploración, conquista y colonización del continente americano, resultando en el
nacimiento de nuevos pueblos, culturas y estados.
Existe controversia respecto al
término "descubrimiento" argumentándose que debe reservarse a los
primeros seres humanos que llegaron al continente hace aproximadamente
14 000 años o incluso al probable primer contacto europeo realizado por los vikingos en el siglo X.
En el artículo se distingue
claramente entre el «acto mismo del descubrimiento», entendido como una serie
de viajes que hicieron navegantes españoles que llegaron a América y la
dimensión del encuentro entre culturas, y el posterior proceso histórico
conocido como la conquista de América que los europeos realizaron a continuación.
Así, el encuentro entre esas dos culturas tuvo importantísimas consecuencias
para ambos.
Unos años antes del
descubrimiento de América, los viajes marítimos portugueses a la India bordeando
la costa de África y siguiendo el derrotero hacia el este a través
del Océano Índico sirvieron
como un estímulo para otros navegantes europeos que creían que era posible
llegar a las regiones de Asia oriental navegando hacia el oeste. Cristóbal Colón defendía
la hipótesis de que el diámetro de la Tierra era tan pequeño que se podía
alcanzar Asia navegando desde Europa hacia poniente. En 1492 consiguió el apoyo
y el patrocinio económico de los reyes Isabel y Fernando de Castilla y Aragón, que le autorizaron a organizar un viaje de exploración que lo
condujo a la costa americana.
Fuera del descubrimiento por
parte de Cristóbal Colón, actualmente existe evidencias de contactos transoceánicos
precolombinos, el primero bien testimoniado arqueológicamente que muestra
asentamientos vikingos en Terranova antes del descubrimiento de Colón que fueron
posteriormente abandonados sin mayor repercusión y por otro lado existen
algunas evidencias materiales y genéticas que apuntan a que pequeños grupos de
navegantes malayo-polinesios pudieron arribar a las costas de América del Sur,
antes de la llegada de Colón. Sin embargo, en ninguno de los dos casos estos
grupos tuvieron un impacto permanente, por lo que en cierto modo no se
consideran un descubrimiento consciente de una civilización por parte de otra
civilización.
Cristóbal Colón,
en representación de los Reyes Católicos de Castilla y Aragón, realizó cuatro
famosos viajes desde Europa a América en 1492, 1493, 1498 y 1502. En el primero de ellos llegó a América el 12 de octubre de 1492, a
una isla de las Bahamas llamada Guanahani, cuya exacta localización aún se discute.
A partir del segundo viaje de
Colón, descubrimientos y conquista
militar progresaron
conjuntamente. Durante los veinte años que separan 1499 de 1519, cuando empezó
la empresa de Fernando de Magallanes, tuvieron lugar los llamados
«viajes de descubrimiento y rescate» «viajes menores» o «viajes andaluces», capitulados
por la corona española con
empresarios privados quebrando el discutido monopolio colombino. En el primero
de estos participó Américo Vespucio, a quien se ha atribuido ser el
primer europeo en proponer que las tierras a las que Colón había llegado no
eran en realidad parte de Asia, sino de un continente desconocido para los
europeos y de cuyo nombre de pila deriva el nombre de "América".
LOS VIAJES DE COLON

Primer viaje
La llegada
a América
El viaje de Cristóbal Colón no
resultó fácil para nadie, de hecho hubo conatos de amotinamiento, pero gracias
a la presencia y las dotes de mando de Martín Alonso Pinzón se consiguieron
resolver estas situaciones. Cuando ya se habían agotado todos los cálculos y
previsiones realizadas por Colón, se oyó desde La Pinta el famoso grito de Rodrigo
de Triana «¡Tierra
a la vista!», dos horas después de la medianoche del 12 de
octubre.
Segundo viaje
Continuó su viaje de exploración
y recorrió las costas de Juana (Cuba) y
Santiago (Jamaica). A
fines de 1494 o principios de1495 se
dirigió hacia el sur.
Los escritos de este viaje
registraron algunas situaciones de violencia sexual contra mujeres indígenas, como la
que relató uno de los hombres de su tripulación.15
Tras este viaje se dedicó a
consolidar el dominio sobre La Española. En 1496 regresó a
España, llegando a Cádiz el 11 de
junio.
Tercer viaje
Posteriormente recorrió y exploró
las tres islas del actual estado de Nueva Esparta, la isla principal la llamó
Asunción, las otras son las actuales Cubagua y Coche. Más
tarde Cristóbal de la Guerra, le
cambió el nombre a La Asunción por el de isla Margarita por la gran cantidad de perlas que
había.
Finalmente arribó a La Española.
En esta isla los españoles se habían sublevado por la falta de riquezas que
supuestamente encontrarían. En una de las negociaciones, Colón propuso a un
grupo de españoles el regreso a Cubagua para el tráfico de perlas. Se fundó un
asentamiento perlífero y más tarde, en 1528, de él
nació la primera ciudad fundada por españoles en continente americano, Nueva
Cádiz.
A la llegada del administrador
real, Francisco de Bobadilla, Colón fue arrestado. Retornó a
España, el 25 de noviembre de 1500, fue puesto en libertad, pero perdió su
prestigio y sus poderes.
Cuarto viaje
Pese a los problemas por la
pérdida de sus poderes, Cristóbal Colón inició el cuarto y último viaje, aunque
con una serie de prohibiciones, como la de tocar tierra en La Española. El
objetivo de este viaje era encontrar un estrecho, el Estrecho de Malaca, que le permitiera llegar a las
Indias, al oeste de las islas
Antillas, ya que se veía que éstas no lo eran aunque no podían quedar
muy lejos de las tierras por él descubiertas. Salió del puerto de Cádiz con dos
carabelas y dos navíos: La
Capitana, La
Gallega, La Vizcaína y el Santiago
de Palos, el día 11 de mayo. Pasando por Canarias, llegó a las Indias en
30 días.
Por los problemas surgidos en La Española, Nicolás de Ovando, nuevo gobernador de la colonia,
no permitió que Colón desembarcase a pesar de una inminente tempestad y que
cambiase uno de sus buques por otro de mejores condiciones. Colón capeó como
pudo el temporal y pasó a Jamaica, aunque la tormenta no le dejó hasta el 12 de
septiembre, 88 días de tormenta.
Siguiendo al oeste, descubriendo
la isla de Guanaja, en la costa de Honduras, en América Central, encontró una embarcación con
mercaderes mayas que le ofrecieron cacao. En la Punta Cajina
(hoy Punta Trujillo) los tripulantes descendieron de sus naves para asistir a
la primera misa católica celebrada en la tierra firme de América.
Continuó al este y lo sorprendió un huracán, durante
varias semanas las 4 naves fueron sacudidas por la tormenta y el 12 de
septiembredoblaron un cabo. Allí se calmó la tormenta y Colón lo bautizó como Cabo Gracias a Dios, en la costa de Honduras, por
decir «Gracias a Dios que al fin salimos de esas honduras» y de allí navegó
hacia el sur.
Varias expediciones siguieron a
los cuatro viajes colombinos. Fueron los Viajes Menores, los cuales permitieron
reconocer la existencia del continente Americano y explorar toda la costa de
Venezuela